Tengo que confesarlo el Baumkuchen es mi total perdición. No tengo reparos en confesar que soy capaz de comérmela entera de una sentada. Por eso, este dulce alemán tan rico típico de Navidad jamás entra en mi casa. Suelo llevar un Baumkuchen al trabajo para compartir a sabiendas que volará en un periquete. Y si realmente tengo antojo, compro la versión más pequeña que encuentre para no caer en la tentación de comérmelo yo solita.
Es de las pocas cosas a las que no puedo resistirme. Y es una de las cosas que más echaría de menos si volviera a España. Así que este año me he animado a hacer la versión casera.
Esta tarta tiene forma de anillo pero en casa es muy difícil darle esa forma así que te propongo esta versión de Baumkuchenspitzen. ¿Pero no es muy difícil hacer eso en casa? Para nada. Difícil no es pero se necesita paciencia porque como te mostraba en mi Instagram es una tarta que se va a haciendo capa a capa. Cada cuatro minutos más o menos, se hornea una capa de la tarta.
Ingredientes
6 huevos
una pizca de sal
250 g de mantequilla en pomada
200 g de azúcar
32 g de azúcar avainillado (dos paquetes)
1 cucharada de ron
200 g de harina
50 g de maicena
100 g de almendra molida
50 g de mermelada de melocotón
Para la cobertura
200 g de chocolate
200 g de nata
50 g de mantequilla
Preparación
Precalentamos el horno a 250 ºC (calor arriba y abajo).
Separamos las claras de las yemas.
Batimos las yemas junto con la mantequilla, el azúcar y el azúcar avainillado hasta que obtengamos una consistencia cremosa (aproximadamente diez minutos). Añadimos el ron.
En otro bol, mezclamos la harina, la almendra y la maicena.
Batimos las claras a punto de nieve.
Agregamos la mezcla de harina a la de yemas. Cuando la mezcla de harina se haya incorporado, Por último añadimos las claras a punto de nieve hasta que todo quede bien integrado.
Yo he usado un molde rectangular de bizcocho, lo he forrado con papel de hornear y spray antiadherente. Una vez tengas tu molde forrado, echa dos cucharadas de masa y repártela bien por el molde. Hornea cuatro minutos. Vuelve a echar dos cucharadas de masa sobre la primera capa. Hornea otros cuatro minutos. Repite esta operación hasta que termines la masa.
Cuando hayas terminado el horneado, saca el Baumkuchen del horno y déjalo reposar cinco minutos. Desmolda con cuidado sobre rejilla.
Calienta la mermelada. Pásala por un colador y pinta la tarta. Ahora ya solo queda hacerle la cobertura de chocolate.
Para la cobertura. Trocea el chocolate. Pon a calentar la nata y añade el chocolate antes de que rompa a hervir. Agrega la mantequilla, que es lo que le da brillo.
Corta la tarta en triangulitos. Y sumerge las puntas en el chocolate. Deja secar. ¡Y tachán!! ¡Listo!
Besines,
M.